POEMA Y MINI-ESCRITO 005

Elías se desahoga

 

--¡Alo! ¿Quién es y qué quieres?

¡Santo, qué te pasa!  Te estoy llamando hace rato y no me contestas, ¿acaso no te acuerdas que tenemos una cena esta noche?

 

--¡Ah, eres tú! Perdóname, Heliana, es que no tengo ganas de salir, por favor entiéndeme.

--¡Quien no entiende eres tú! ¿Dime, hasta cuándo seguirás lamentándote por lo que sucedió en el Carmelo? ¡Reprende esa depresión! ¡No le hagas caso a esa Jezabel, hija de Satanás!

 

--No es solo eso, Heliana, hay algo que tú no sabes...

--¿Qué pasa? Dime de una vez por favor. ¿Me estás escondiendo algo?

 

--Bueno, esta bien, te diré, pero por favor, no le digas a Eliseo, tú sabes que él es mi sucesor y no quiero que sepa esto.

--Esta bien, no te preocupes,  no le diré, pero,  ¡habla, que me tienes en ascuas!

 

--Es que siento que mi relación con Dios no es la misma, me siento culpable y no creo que soy digno de seguir el llamado profético. ¿Te confieso algo?

--Dime, amigo, te escucho.

 

--¿Recuerdas que te dije que cuando Baal no respondía a sus profetas,comencé a burlarme de ellos?

--Si, si,  recuerdo, pero, ¿es por esa razón que estás así? No veo nada malo en eso.

--No,tú no entiendes.

 

- Pues, explícame, que me tienes inquieta.

--Permíteme explicarte: cuando yo me burlaba de los profetas de Baal, sentí que  “algo” entró en mí, era como un espíritu; y lo peor es que yo gozaba cuando les dije: “¡Griten en alta voz… quizás, tal vez duerme y hay que despertarle!” Después de eso, no soy el mismo, no he querido continuar, Heliana, ¡le fallé a Dios, me llené de ira y ego!

 

- ¡Santo, no tenía idea que te sentías así. Tranquilo,  eres humano y eso puedo pasarle hasta el hombre más consagrado. Pero, estoy segura que si le pides perdón a Dios, él “es fiel y justo para perdonar tus pecados y limpiarte de toda maldad”.

 

--¿De verás lo crees?

--Estoy segura. Quiero orar por ti, pero necesito que nos veamos esta noche y conversemos más sobre este asunto, ¿te parece?

--Está bien, gracias, Heliana, realmente eres la mejor.

--¿Qué harías sin mí? ¡Ja, ja, ja! Bueno, báñate y vístete y nos vemos a las 7:00 en nuestro lugar favorito, ¿vale?

--Ok, nos vemos ahorita.